El exdiputado del Atlántico Nicolás Petro, hijo del presidente de Colombia, Gustavo Petro, se declaró inocente ante los cargos de enriquecimiento ilícito y lavado de activos, en el marco de las investigaciones relacionadas con los llamados ‘narcopagos’. En una audiencia que ha capturado la atención nacional, el hijo mayor del mandatario negó cualquier vínculo con actividades ilícitas y rechazó los cargos imputados por la Fiscalía General de la Nación.
«Señor juez, no. Yo soy inocente», afirmó Petro ante el juez Hugo Carbonó, quien preside el caso. Esta declaración marca un punto crítico en el proceso judicial, especialmente porque cierra la posibilidad de un acuerdo o negociación con la Fiscalía, ya que los plazos legales para estas alternativas han expirado.
Más de 30 testigos serán llamados al juicio de Nicolás Petro
La audiencia, llevada a cabo bajo estrictas medidas de seguridad, fue escenario de una solicitud clave de la fiscal del caso, Lucy Laborde, quien pidió avanzar hacia la etapa probatoria. Por su parte, el abogado defensor de Nicolás Petro, Alejandro Carranza, dejó claro que la estrategia de su cliente se basará en una sólida defensa, sustentada en el testimonio de más de 30 testigos que serán llamados a declarar.
Entre los testigos mencionados destacan figuras de relevancia nacional e internacional, incluyendo:
- Laura Ojeda, actual pareja sentimental de Nicolás Petro, cuya declaración podría arrojar luz sobre aspectos clave de la investigación.
- Samuel Santander Lopesierra, conocido como «El hombre Marlboro», quien previamente ha sido vinculado a casos de contrabando de cigarrillos y otras actividades ilícitas.
- ‘El Turco’ Hilsaca, empresario señalado por investigaciones relacionadas con corrupción y narcotráfico.
- Christian Daes, reconocido empresario y directivo de Tecnoglass, cuya participación en este caso ha despertado interrogantes.
- Martha Mancera, exvicefiscal general de la Nación, y el fiscal Mario Burgos, quienes tendrían un papel fundamental para esclarecer el contexto en el que se desarrollaron las acusaciones.
Este listado diverso de testigos refleja la magnitud del caso y su impacto en distintas esferas de la sociedad colombiana, desde la política hasta el sector empresarial.
El origen del escándalo y las acusaciones contra Nicolás Petro
El caso de Nicolás Petro está enmarcado en el escándalo conocido como los ‘narcopagos’, un supuesto entramado de corrupción que involucra recursos de dudosa procedencia utilizados durante la campaña presidencial de 2022. Según la Fiscalía, Petro habría recibido dinero de figuras cuestionadas, como Lopesierra y Hilsaca, bajo la promesa de obtener favores políticos o contratos públicos en un eventual gobierno de Gustavo Petro.
Los cargos de enriquecimiento ilícito y lavado de activos se fundamentan en movimientos financieros irregulares detectados por las autoridades, que no tendrían un sustento claro en los ingresos declarados por Nicolás Petro. La Fiscalía asegura que estos recursos habrían sido utilizados para financiar un estilo de vida ostentoso, incluyendo la adquisición de bienes inmuebles y otros gastos suntuosos.
Sin embargo, el abogado Carranza sostiene que su cliente no tiene vínculos con actividades ilegales y que el juicio demostrará su inocencia. «Este proceso será la oportunidad para que Nicolás Petro aclare su nombre y desmonte las acusaciones que se han tejido en su contra», afirmó Carranza durante la audiencia.
Lo que está en juego en el caso Petro
Más allá de los aspectos judiciales, el caso de Nicolás Petro tiene implicaciones políticas significativas. Como hijo del presidente Gustavo Petro, su situación ha generado un impacto mediático y ha alimentado debates sobre la relación entre la familia del mandatario y las investigaciones en curso. Este proceso podría ser visto como una prueba para las instituciones judiciales del país, que deberán demostrar independencia y transparencia frente a un caso de alto perfil.
Por otro lado, la negativa de Nicolás Petro a aceptar los cargos y la decisión de avanzar hacia un juicio completo podría extender la duración del caso, dejando un rastro de incertidumbre sobre su desenlace. En este sentido, la pregunta que muchos se hacen es si las pruebas presentadas por la Fiscalía serán suficientes para obtener una condena o si, por el contrario, la defensa logrará demostrar su inocencia.
A medida que avanzan las etapas procesales, la atención seguirá centrada en las declaraciones de los testigos, las pruebas documentales y el desarrollo de las audiencias. Este caso no solo determinará el futuro judicial de Nicolás Petro, sino que también tendrá un impacto en la percepción pública de las instituciones y en la confianza de los colombianos en la justicia.
