En la madrugada de este lunes, un grupo de más de 300 personas invadió el predio conocido como Posada Alemana, ubicado en el municipio de Salento, Quindío. Los ocupantes, que llegaron con banderas de Colombia, afirmaron ser campesinos de Risaralda y buscan establecerse en el terreno.
Actualmente, este predio se encuentra bajo la custodia de la Gobernación del Quindío, luego de haber sido cedido por la Sociedad de Activos Especiales (SAE) hace dos años. Anteriormente, la Posada Alemana fue una hacienda privada del exnarcotraficante Carlos Enrique Lehder y pasó más de dos décadas en proceso de extinción de dominio.
Respuesta de las autoridades y medidas de seguridad
El secretario del Interior del Quindío, Jaime Pérez Cotrino, informó que las autoridades ya están interviniendo en este caso de ocupación irregular.
“En compañía de funcionarios de la Alcaldía de Salento, la Policía y el Ejército, estamos en el predio evaluando la situación. Se ha convocado un consejo de seguridad extraordinario para dialogar con estas personas y definir las acciones a seguir”, indicó Pérez Cotrino.
Además, la Gobernación del Quindío mantiene conversaciones con inversionistas privados para el desarrollo de un proyecto turístico en la Posada Alemana. Uno de los planes en estudio contempla la construcción de un teleférico que conectaría este punto con el casco urbano de Salento.
Otro caso de invasión en menos de una semana
Este es el segundo caso de invasión de predios registrado en el Quindío en menos de una semana.
El pasado martes, 200 campesinos del Cauca ocuparon una finca administrada por la SAE en el municipio de La Tebaida. Tras negociaciones con las autoridades departamentales, accedieron a retirarse voluntariamente casi 30 horas después.
El aumento en los casos de ocupación ilegal de terrenos en la región ha generado preocupaciones sobre la seguridad y la estabilidad de los proyectos en desarrollo. Las autoridades han enfatizado que se tomarán medidas contundentes para prevenir futuras invasiones y proteger los bienes del Estado.
