Un primer gesto de desarme en la Paz Total
Durante el acto, el presidente Gustavo Petro ordenó la destrucción inmediata del arsenal, compuesto por minas antipersonal, morteros, cilindros bomba y granadas. «La paz es un deber», enfatizó el mandatario, destacando que este es solo el primer paso en el compromiso de Comuneros del Sur con la desmovilización.
El grupo armado, que cuenta con aproximadamente 100 integrantes, ha negociado con el Gobierno desde septiembre de 2024 y se ha comprometido a entregar el resto de su material bélico en los próximos tres meses. Además, el acuerdo firmado incluye compromisos en sustitución de cultivos ilícitos, la reincorporación de excombatientes, la memoria histórica y el control de la minería ilegal en la región.
El impacto en Nariño y el respaldo internacional
El evento contó con la presencia de diplomáticos, representantes de la OEA, la Iglesia católica y delegados del ELN, lo que subraya la importancia del proceso en el contexto internacional. Más de 2.000 personas asistieron, incluyendo víctimas del conflicto armado, como Cristian Andrés Melo, presidente de la Asociación de Sobrevivientes de Minas Antipersonal de Abades, quien recordó que «con cada mina antipersonal que se destruye, se salva la vida de alguien en la comunidad».
Por su parte, el Ejército ha expresado su descontento con la negociación, ya que el ELN como estructura aún no ha llegado a un acuerdo general de paz. Sin embargo, el Gobierno sigue firme en su apuesta por un desarme progresivo y territorializado.