Un devastador accidente aéreo sacudió este domingo a la ciudad turística de Gramado , en el estado brasileño de Rio Grande do Sul . Una avioneta Piper Cheyenne 400, pilotada por el empresario Luiz Claudio Salgueiro Galeazzi, se estrelló en una zona comercial causando la muerte de los diez ocupantes, todos pertenecientes a la misma familia. El siniestro también dejó 17 heridos en tierra, dos de ellos en estado grave, según reportó Defensa Civil.
La aeronave despegó del municipio vecino de Canela, otro destino turístico de la región, pero pocos minutos después impactó contra la chimenea de un edificio, dañó el segundo piso de una casa y finalmente cayó sobre una tienda de muebles. Los destrozos alcanzaron también a una posada cercana. Las causas del accidente aún están bajo investigación.
Gramado, conocida por su afluencia turística, especialmente durante la Navidad, se vio envuelta en el caos tras el accidente. El presidente Luiz Inácio Lula da Silva expresó su pesar en redes sociales: «Mi solidaridad a los familiares de las víctimas fatales de la caída de un avión en el centro de Gramado. Espero que los heridos tengan una rápida recuperación».
Este siniestro ocurre apenas un día después de otra tragedia en Brasil, donde 41 personas murieron en un accidente de autobús en el estado de Minas Gerais. El fin de semana ha dejado un saldo alarmante de víctimas, marcando uno de los periodos más oscuros del año en el país.
En agosto pasado, Brasil ya había vivido su peor tragedia aérea en 17 años, cuando un avión bimotor con 62 personas a bordo se estrelló en Vinhedo, São Paulo, sin sobrevivientes. Estos sucesos recientes han encendido alarmas sobre la seguridad en los transportes aéreos y terrestres del país.
La comunidad de Gramado, conmocionada por los hechos, enfrenta un difícil proceso de recuperación mientras las autoridades continúan investigando lo ocurrido. La tragedia ha dejado un vacío en las familias afectadas y en los cientos de residentes y visitantes que fueron testigos del lamentable suceso.
