Peajes injustos en el Eje Cafetero y el de San Clemente, ubicado en una región que separa al municipio de Quinchía con la capital. Este peaje, a cargo de INVÍAS, aísla y encarece la movilidad de los habitantes del municipio y sus alrededores quienes en su mayoría son campesinos.
La inversión detallada del recaudo es un enigma, no solo para éste, si no para los 168 peajes del país, ya sean administrados por el gobierno nacional -INVÍAS- o ya sean por concesión o a cargo de gobernaciones. En el caso del peaje de San Clemente, en el mes de mayo se envió un derecho de petición para conocer el año de creación, los ingresos detallados recaudados, el detalle de la inversión de esos recursos y el mantenimiento de la vía Quinchía. Esta información, que, de acuerdo con la Ley de transparencia, debería ser pública, no sólo no es posible encontrarla de manera detallada en la páginas del Ministerio de Transporte o INVÍAS o incluso en la RAP Eje Cafetero, sino que es dilatada entre varias dependencias para no dar respuesta adecuada a la solicitud. Esas dilaciones se convierten en otra barrera al acceso a la información y en terreno adecuado para materializar riesgos de corrupción.
Después de tres meses, la única respuesta entregada por el INVÍAS fueron las cifras anuales de recaudo, con valores que para algunos años no son coherentes y sin que para los mismos se diera una aclaración. Para el 2018 se reporta $6.600 millones, 2019 $6.213 millones y para los años 2020 a 2023, la cifra se reduce a $2.736, $3.508, $2.280 y $2.631 millones respectivamente. La dificultad para acceder a la información sobre los peajes es evidente, pero además sorprende que las entidades del nivel regional, gobernación, gerencias de la CGR y espacios de debate sobre desarrollo regional y municipal, como lo es la RAP, “poco conozcan” sobre este tema. Lo escribo ente comillas, porque he llegado a la conclusión que no hay interés, ni voluntad política para que este tema se conozca en profundidad.
¿Qué tiene que ver el peaje de Quinchía con el “Zar de los peajes” Menzel Amín y su hijo? Los empresarios cartageneros, megacontratistas y ¿financiadores de campañas políticas? son reconocidos en las secretarías de infraestructura de las entidades del Caribe por participar en proyectos cuestionados donde además tuvieron relación con ODEBRECHT. Su empresa KMA, hace parte del consorcio que en octubre de 2021 le fue adjudicado por 10 años el recaudo de los 35 peajes a cargo del INVÍAS, tres de ellos ubicados en el Eje Cafetero: Cerritos II, La Línea y San Clemente. El proceso de adjudicación fue cuestionado incluso por Germán Vargas Lleras quien afirmó que fue un proceso totalmente amañado.
Es claro que el negocio de los peajes viene enriqueciendo desde hace años a todos los que intervienen en su entorno, mientras son una trampa de pobreza para municipios y sus habitantes. La pregunta es ¿por qué en tantos años los dirigentes de la región no han tomado cartas en el asunto?
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