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La noche del 11 de junio de 1992 marcó la historia de la música vallenata con el asesinato de Rafael Orozco Maestre, una de las figuras más icónicas del género. Tres décadas después, su muerte sigue rodeada de preguntas sin respuesta y teorías controvertidas que alimentan el enigma de su muerte.
El impacto de la noticia fue inmediato. Según las declaraciones de Carlos Hugo Jiménez, cronista de la época, en el podcast ‘Más allá del silencio’, la muerte de Orozco desencadenó una ola de conmoción en todo el país.
¿Quién mató a Rafael Orozco?
“Al día siguiente, Barranquilla era un caos. La gente lloraba en las calles, se volcaban hacia la catedral, y luego al coliseo Humberto Perea, donde trasladaron el cuerpo por la cantidad de asistentes”, aseguró el periodista.
Finalmente, el sepelio en el cementerio Jardines del Recuerdo fue un evento cargado de dolor. Entre abrazos y lágrimas, amigos como Israel Romero y Fabio Poveda se despidieron de Orozco, dejando una imagen imborrable de esa fatídica tarde.
Esa noche, Orozco había regresado a su casa después de una gira por Venezuela. Sin embargo, alrededor de las 9:30 p.m., alguien tocó la puerta.
Pese a las advertencias de su esposa, Clara Cabello, salió al encuentro de dos músicos de Diomedes Díaz. Durante la conversación, una tercera persona apareció y le disparó diez veces, acabando con su vida.
La investigación inicial señaló a un hombre conocido como ‘El Negro’ Zubiría’, quien fue liberado tras demostrar su inocencia. Más tarde, surgieron los nombres de Jorge Enrique Navarro y su hijo, vinculados por una supuesta relación amorosa entre Orozco y María Angélica Navarro, hija del primero.
María Angélica admitió ante las autoridades su romance con el cantante, mientras que rumores sobre un triángulo amoroso involucraron a José Reinaldo Fiallo, alias ‘El Nano’, un supuesto narcotraficante de Cartagena.
“El tema de María Angelica desemboca en el nombre de José Reinaldo Fiallo, alías ‘El nano’, un hombre de 32 años, supuestamente de un peligro bárbaro y decían que el tipo era un duro en Cartagena y estaba relacionado con algunos carteles del narcotráfico de la costa”, agregó Carlos Hugo.
El escolta de ‘El Nano’, Sergio González, alias ‘El Tato’, fue identificado como el autor material del asesinato. Seis años después del asesinato, la Fiscalía cerró el caso calificándolo como un crimen pasional.
Sin embargo, una nueva teoría publicada en medios locales sugirió que el cantante pudo haber tenido problemas con narcotraficantes por asuntos relacionados con lavado de dinero.
A la desaparición de los músicos de Diomedes Díaz que estuvieron presentes esa noche, se suma la misteriosa muerte de un celador cercano al lugar del asesinato y el robo del carro de Orozco días antes, en el que viajaba con María Angélica.
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