La figura de César Lorduy, actual presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE), se encuentra bajo el escrutinio público en medio de graves acusaciones que ponen en riesgo no solo su carrera política, sino también la credibilidad de la institución que lidera. Entre las denuncias más recientes se incluyen un presunto caso de acoso sexual y corrupción, además de señalamientos relacionados con un supuesto feminicidio ocurrido hace más de 40 años. Todo esto en un contexto donde miembros de su propio partido, Cambio Radical, piden su renuncia, mientras el presidente Gustavo Petro también ha sugerido en múltiples ocasiones que deje el cargo.
Denuncias de acoso sexual y corrupción
El escándalo más reciente que ha salpicado a Lorduy surgió a partir de una denuncia realizada por la congresista Ingrid Aguirre, quien lo acusó de ofrecerle favores sexuales a cambio de decisiones favorables para su partido político, Fuerza Ciudadana, dentro del CNE. Según Aguirre, Lorduy habría utilizado su posición como magistrado para condicionar favores a su partido, lo que ha sido ampliamente rechazado por diversos sectores políticos. Esta denuncia fue revelada en una entrevista con la periodista María Jimena Duzán, lo que encendió las alarmas y generó un debate nacional sobre la ética del magistrado.
A esta denuncia se suman voces dentro de su propio partido que exigen que se retire del cargo. El senador de Cambio Radical, Carlos Motoa, ha sido especialmente crítico, señalando que Lorduy ha manchado la imagen del partido y que su comportamiento ha sido «tan inescrupuloso como macabro». Motoa incluso aludió a las decisiones que el magistrado ha tomado en el CNE, algunas de las cuales habrían afectado la calidad de la democracia en regiones como el Valle del Cauca.
Por su parte, la representante a la Cámara por Huila, Luz Ayda Pastrana, también de Cambio Radical, ha afirmado que lo más adecuado sería que Lorduy se apartara del cargo mientras se adelantan las investigaciones. «Considero que cada quien tiene que purgar sus penas», aseguró Pastrana, dejando claro que el partido no puede respaldar este tipo de conductas sin una investigación previa.
Un pasado marcado por el presunto feminicidio de Alicia Ribaldo
A la controversia actual se suma una oscura historia del pasado de César Lorduy. En 1979, cuando Lorduy tenía 23 años, fue acusado por la familia de Alicia Ribaldo, de 16 años, de haberla asesinado con una escopeta. Según la versión de Lorduy, el incidente ocurrió de manera accidental mientras manipulaba un arma junto a un celador. «La escopeta se golpeó y se accionó en la dirección donde estaba Alicia, quien trabajaba conmigo, y lamentablemente ocurrió el hecho», explicó el magistrado en una entrevista en 2018. No obstante, la familia de la víctima sostiene que el disparo fue intencional, lo que ha mantenido viva la controversia.
Este caso, que parecía haber quedado en el pasado, ha resurgido en el contexto de las actuales denuncias contra Lorduy, avivando las críticas en su contra. De hecho, la representante Jennifer Pedraza hizo pública su protesta al levantarse de un panel moderado por Lorduy sobre el voto femenino en Colombia, en rechazo a su presencia.
Impacto en su futuro político
Las múltiples acusaciones que enfrenta César Lorduy han puesto en duda su futuro político. Se sabe que el magistrado tenía intenciones de lanzarse al Senado en las elecciones del próximo año, una aspiración que ahora parece tambalear debido a los «ruidos» que lo rodean. Tanto su partido como sectores de la oposición han expresado su rechazo a que Lorduy permanezca en el cargo, lo que genera incertidumbre sobre si podrá mantener su posición en el CNE o si será obligado a renunciar.
El presidente Gustavo Petro ha sugerido públicamente en dos ocasiones que Lorduy debería dimitir, especialmente tras la denuncia de acoso sexual. La presión de la opinión pública y las voces disidentes dentro de Cambio Radical podrían jugar un papel determinante en el desenlace de esta situación, que además podría influir en las elecciones del 2024, un proceso electoral que ya está a la vuelta de la esquina.
¿Qué sigue para César Lorduy?
El panorama para Lorduy es sombrío. Si bien ha negado las acusaciones tanto del pasado como del presente, el creciente clamor por su salida no puede ignorarse. La investigación del CNE al presidente Petro por supuestas irregularidades en la financiación de su campaña en 2022, que Lorduy preside, también está en el centro del debate, pues sus detractores dentro del Pacto Histórico han cuestionado la imparcialidad de este proceso.
Las próximas semanas serán cruciales para definir el destino político de César Lorduy. ¿Logrará mantenerse en el cargo o las denuncias y presiones lo obligarán a dimitir? Lo cierto es que, en medio de este torbellino de acusaciones, su futuro parece estar cada vez más comprometido, afectando no solo su imagen, sino también la credibilidad del Consejo Nacional Electoral en uno de los momentos más críticos para la política colombiana.
