Fomentar liderazgos representativos y que contribuyan realmente a la transformación y resignificación del verdadero tejido social en una sociedad cada vez más inmediatista, egoísta, superficial, poco empática y absorta de la realidad presenta grandes desafíos para fortalecer las habilidades del líder y, a su vez, a este como sujeto individual.
Las cosas, el tiempo y la vida cambian de manera constante, con transformaciones profundas que, a su vez, traen implícitos un sinnúmero de desafíos y nuevos retos. Independientemente de cuán bueno sea un líder, no puede hacer que esto se detenga. Es la manera en que el líder maneje esos desafíos lo que definirá su rol, y esto está relacionado directamente con su efectividad.
De allí que muchos sean los llamados y pocos los escogidos, porque, como bien lo dice una frase, «Un diamante es solo un pedazo de carbón que ha manejado el estrés de manera excepcional». Algunos desafíos vienen en forma de personas o problemas que presentan obstáculos para alcanzar una meta. En una generación donde todo debe ser suavizado, dado en bandeja de plata, y donde se percibe que todos tienen una obligación conmigo, debo recibir siempre lo mejor, los demás son los culpables y no se asumen responsabilidades, el manejo inadecuado de la frustración hace todo más complicado.
Incluso estas mismas conductas pueden provenir del propio líder o de la situación misma en el ejercicio del liderazgo, pero son desafíos que cada líder debe enfrentar y aprender a gestionar para transmitir experiencia y conocimiento. También puede parecer que la palabra “retos” hace referencia a “problemas”, pero esto no es necesariamente cierto. A menudo, las situaciones positivas presentan los mayores desafíos, ya que el líder también se prueba en su habilidad para aprovechar las oportunidades, sus fortalezas y el entorno. Un reto siempre es un llamado para ascender a otro nivel, para probarse a sí mismo, mejorar en el proceso, fortalecerse y demostrarse que puede lograr lo que en principio parece difícil o incluso imposible.
Esta es la labor que, a lo largo de más de 12 años, ha desempeñado el Team Colombia Barber. Por ello, este movimiento, con un grupo representativo de sus líderes departamentales, acudió al llamado del Departamento del Valle del Cauca para hacer presencia en el municipio de Yumbo, sector La Pérez, una hermosa reserva forestal donde la comunidad abrió sus puertas a uno de los eventos de barbería más antiguos del país: el Gran Cali Barber. En su novena versión, contó con un formato actualizado y el desafío denominado «Desafiando tus límites», un evento que, al igual que Eje Barber International Evolution, convoca a barberos de todos los rincones del país y del exterior.
Hoy resaltamos, felicitamos y enaltecemos a este grupo de jóvenes que verdaderamente creen en el proceso y el trabajo de transformación y reconstrucción del verdadero tejido social que realiza el Team Colombia Barber. Con su participación, este grupo de jóvenes se atrevió a salir de su zona de confort, desafiaron sus límites y adquirieron nuevos conocimientos, entendiendo que esto debe ser un trabajo constante y en equipo, sin individualismos egoístas. Solo trabajando en unidad y sinergia se pueden alcanzar no solo objetivos individuales, sino colectivos. Felicitaciones a estos campeones, que continúen trabajando por su evolución y por la de nuestro territorio, porque Risaralda es y seguirá siendo la Capital Mundial de la Barbería, con el apoyo de cada uno de ustedes.