
El presidente Gustavo Petro ha vuelto a ser centro del debate público, esta vez por responder con ironía a una carta de Álvaro Leyva, exministro de Relaciones Exteriores, que lo acusa de haber tenido una conducta inadecuada durante una visita oficial a París en junio de 2023. La carta, publicada en la red social X, se suma a una serie de desencuentros entre ambos políticos, pero esta vez tocó un punto especialmente sensible: la vida personal y la salud del mandatario.
No es la primera vez que este episodio en la capital francesa genera rumores. Pero la forma en que Leyva lo trae de vuelta al escenario político, con palabras como “problemas de drogadicción” y referencias al supuesto desconocimiento del paradero del presidente, marca una nueva escalada en el conflicto entre antiguos aliados del gobierno del cambio.
El exministro Leyva revive el episodio de París y lanza duras acusaciones
Álvaro Leyva, quien fue una figura clave en el gabinete de Petro hasta su reciente salida, publicó un documento en el que narra su experiencia durante el viaje oficial a Francia, destacando la “desazón y desconcierto” que vivió al enterarse del paradero del presidente durante esos dos días en los que, según él, desapareció sin dejar rastro oficial.
“Como si inteligencia francesa fuera incompetente como para no haber conocido su paradero (…) y mucho más cuando supe dónde había estado”, escribió el excanciller. Las palabras no solo dejaron entrever una crítica a los servicios de seguridad, sino que plantearon una sospecha de carácter personal y privado, lo cual encendió las alarmas en la opinión pública y en los medios.
La respuesta de Petro: ironía y defensa desde X
Lejos de optar por un comunicado institucional, el presidente Petro eligió responder directamente en su cuenta oficial de X, en una serie de mensajes que mezclan sarcasmo, reproche a los medios y una defensa de su vida privada.
“La única manera para que la prensa publique cartas, es insultándome. No solo habla mal del escritor, sino de la prensa”, escribió inicialmente, en clara alusión a la repercusión mediática de la carta de Leyva.
Posteriormente, hizo referencia al episodio parisino con un tono irónico: “¿Es que París no tiene parques, museos, librerías, más interesantes que el escritor, para pasar dos días? Casi todo en París es más interesante”. Con estas palabras, minimizó las acusaciones y sugirió que su estancia en la ciudad fue más bien una experiencia personal, desligada de los compromisos oficiales.
Finalmente, cerró su respuesta con una alusión familiar: “¿Es que acaso no tengo hijas y nietas en París, muchísimo más interesantes que el escritor?”. Así, Petro recurrió a su entorno íntimo para explicar —sin explicar del todo— sus actividades durante esos días.
¿Grieta política o estrategia de distracción?
El cruce entre Gustavo Petro y Álvaro Leyva también puede entenderse como una manifestación del desgaste que sufre el gobierno con antiguos miembros de su equipo. Leyva, quien tuvo un rol activo en las negociaciones de paz y en la política exterior, ahora se convierte en uno de sus críticos más duros, lo que refleja una fractura interna dentro del oficialismo.
Pero, ¿estamos frente a una disputa política legítima o ante una estrategia más compleja de distracción mediática? El tono de la respuesta del presidente, lejos de lo institucional, abre esa pregunta. Mientras tanto, sectores de oposición y defensores del gobierno analizan cada palabra de este intercambio como una pieza más en el ajedrez político colombiano.
El episodio no solo afecta la imagen presidencial, sino que también deja entrever tensiones profundas sobre la transparencia, la salud del jefe de Estado y la estabilidad del círculo más cercano al poder.